Cómo Elegir Un Negocio - Mega Guia

Cómo elegir un negocio rentable y adecuado para ti

Cuando pensamos en cómo elegir un negocio, surgen muchas preguntas:

  • ¿Cómo sé si estoy eligiendo un negocio que será rentable?
  • Incluso si es rentable, ¿me dará suficiente para vivir?
  • ¿Será el negocio adecuado para mí, o me voy a arrepentir más adelante? ¿Voy a disfrutarlo?
  • El negocio que estoy por elegir, ¿me va a permitir vivir mejor? ¿O me va a esclavizar?

¡Y estas dudas no son algo que le pase sólo a emprendedores novatos! Muchas veces los mismos dueños de negocio se hacen preguntas:

  • ¿Cómo sé si mi negocio es una buena idea?
  • ¿Hay otras opciones que se conecten más con mis pasiones? ¿O más rentables?

Llegar a una idea de negocio rentable que nos convenza al 100% y en la que podamos enfocarnos por varios años es un gran logro.

Sin embargo, escoger un emprendimiento es una decisión que puede sentirse casi imposible si no tenemos un camino para tomarla.

Si estás preguntas te están dando vueltas en la cabeza, ¡entonces este artículo es para ti!

Hoy vamos a ver paso a paso el sistema completo que nosotros usamos para elegir ideas de negocio para nosotros, para nuestra familia, amigos y todos nuestros clientes en las mentorías de negocio 1 a 1.

Aplicando los pasos en este artículo lograrás elegir un negocio que:

  • Sea rentable = te genere ingresos de manera recurrente, con potencial de crear una estructura que no dependa de tu tiempo.
  • Sea adecuado para ti = saque provecho máximo de tus habilidades, experiencia y circunstancias.
  • Te acerque a tus sueños = que te permita vivir un estilo de vida que ames, sea por estar más en tu casa, por viajar o por poder tener un lugar propio increíble.
  • Disfrutes = que no te sientas esclavizado por el negocio, sino que te entusiasme cada día que trabajes en él.

Las herramientas aquí han dado lugar no sólo a Superhábitos, sino también que están detrás de negocios como Más Allá del Sistema, Viviendo en Libertad,  Movete GustateGimnasio para Vendedores, Producto Local, 2 Reinas Tatoo, y decenas de emprendimientos más.

Son pasos útiles para negocios físicos o digitales, de servicios profesionales, fabricación o de comercio.

Sirven para cosas «técnicas» (como sistemas o finanzas), para negocios basados en conocimiento o servicios y para cosas «raras» (juegos, viajes, salidas en bici).

¿Entusiasmado? ¡Yo también! :) ¡Así que manos a la obra!

Para que te sea fácil volver y aplicar todas las herramientas, aquí tienes un índice de todas las partes de la guía:

¿Por qué es tan importante saber cómo elegir un negocio?

Elegir el emprendimiento correcto es una decisión en la que vale la pena invertir tiempo, por varios motivos:

1. El primero -y más importante- es que si estamos tomando la decisión de empezar un negocio, ¡más vale que sea para pasarla bien y no para sufrirlo! El motivo que lleva a la mayoría de las personas a emprender es el deseo de mejorar su calidad de vida.

Eso no implica sólo ganar más: también incluye hacer más de las cosas que nos gustan, tener un día a día lindo y sentirnos realizados con nuestra labor. El negocio que elijamos define todo eso.

2. El segundo es que elegir el negocio adecuado aumenta nuestras probabilidades de éxito. Todos hemos leído o escuchado las estadísticas que dicen que el 90% de los negocios fracasan en el primer año.

Si queremos superar esa etapa y construir algo genial, entonces tenemos que elegir un negocio que aproveche al máximo nuestros recursos y potencie nuestras ventajas competitivas. Así evitaremos caer frente a la competencia (o encontrarnos con un negocio sin clientes).

3. Elegir el negocio adecuado afecta nuestra productividad. Está demostrado que las personas somos más productivas cuando disfrutamos de una tarea, y cuando vemos un propósito claro detrás de ella.

Eso significa que si eliges el emprendimiento que mejor se ajuste a ti y tus objetivos, serás más productivo. Si además ves una causa profunda en tu negocio, serás aún más productivo.

4. Cuando emprendes, tu proyecto se convierte en una parte importante de tu vida, y debe hacerte sentir orgulloso. Una parte fundamental en el éxito de un negocio son las ventas. Algo que noto en todas las mentorías es que la solución para vender sin convertirse en un pesado es simple: sentir pasión y orgullo por tu proyecto, y por cómo cambia la vida de las personas.

Para que un negocio crezca vas a tener que hablar de él a tus amigos, clientes y colegas, ¡y elegir el adecuado es importante para que lo hagas en paz!

5. Finalmente, elegir el negocio adecuado es importante para realizar buenas inversiones. Empezar un nuevo emprendimiento siempre implica una inversión. Como mínimo, es una gran inversión de tiempo (con sólo 1 hora por día en 2 años son 730 horas, que a U$10/h serían 7.300!!).

En la mayoría de los casos, invertimos aún más tiempo, y a eso se le suman inversiones de dinero (en herramientas, formación, publicidad, etc, etc.). Todo eso puede ser un gasto o una inversión, dependiendo de si obtenemos algo a cambio… ¡y eso depende de saber cómo elegir el negocio adecuado! El negocio que elijamos poner va a ser rentable si seleccionamos la idea adecuada.

Elegir un negocio rentable y adecuado para ti: los factores clave

A la hora de decidir qué negocio vamos a empezar y dónde vamos a focalizar nuestra energía, lo primero es analizar cuáles son los factores clave que entran en juego.

De hecho, sólo con leer la sección anterior ya empiezan a aparecer las primeras piezas del rompecabezas, ¿no?

Para entender estos factores, lo primero que debemos tener presente es que un negocio, en su aspecto esencial, siempre consiste en resolver problemas de otras personas (quitarles un peso de encima, o ayudarlos a llegar más rápido a un objetivo) y cobrar un precio justo a cambio.

A partir de ahí, la ecuación aquí es simple: el tiempo que nos tomará llegar a un negocio rentable depende, directamente, de 2 factores.

El primer factor es el tiempo que nos tome desarrollar los hábitos emprendedores básicos: proactividad, organización, comunicar con claridad, sistematizar, etc. Esto es algo que todos los emprendedores deben desarrollar por igual, independientemente del negocio que elijan.

El segundo factor es cuánto tiempo nos toma desarrollar y poder entregar el producto/servicio central de nuestro negocio (la solución que mejora la vida de otros). Este es un factor que marca qué tan rápido nuestro emprendimiento logra ser rentable, y que depende 100% de que elijamos el negocio adecuado para nosotros. Hay varios sub-factores que influyen en esto:

A) El negocio correcto debe capitalizar/catalizar las fortalezas y habilidades que ya tienes

Usemos mi caso como ejemplo para analizar la importancia de este principio.

A mediados de 2013 estaba buscando cómo elegir un nuevo negocio para empezar. Para ese momento de mi vida tenía mucha experiencia en 3 temas: abogacía, productividad y enseñanza. El primero era mi profesión.

El segundo era un hobbie que llevaba varios años desarrollando, y que me había permitido no sólo tener buenos resultados profesionales, sino también tener negocios/inversiones a la par de mi trabajo, dar clases en la facultad y hacer investigación académica y publicaciones.

El último punto surge de lo anterior: además de mi trabajo y negocios, siempre me gustó escribir y dar clases, y llevaba varios años realizando ambas cosas de manera constante.

Tenía que elegir el negocio adecuado.

En ese momento, había varias ideas dando vueltas: enfocarme en un negocio de e-commerce de bijouterie, una idea/sueño de poner un café, aprender inversiones financieras, o un blog sobre hábitos y productividad.

Las 4 opciones tenían ventajas y desventajas, y me entusiasmaban de maneras diferentes.

Sin embargo, había algo claro: nunca fui bueno en temas de moda, y menos en moda femenina. Para hacer un buen trabajo en bijouterie iba a tener que pasar una buena cantidad de tiempo sumergiéndome en ese universo, para entenderlo y poder ayudar a los consumidores ahí.

Descartado.

Lo mismo si quería incursionar en el mundo de la gastronomía: nunca había hecho nada ni remotamente conectado con eso, y tenía que aprender todo desde cero. Segunda idea afuera.

Quedaban 2 opciones: para las inversiones, necesitaba aprender mucho también (nunca había hecho ninguna), y además necesitaba tener un capital importante (que no tenía).

Aprender todo eso podía ser tranquilmente un año de estudio, y reunir el capital iba a tomarme al menos la misma cantidad de tiempo. Yo quería resultados pronto, para dejar mi trabajo, así que descarté esa opción y me enfoqué en la última…

El Blog, en cambio, era algo que podía montar aprovechando conocimientos que ya tenía. No tenía que aprender para poder ayudar, porque mi mi experiencia con hábitos y productividad era más que suficiente para eso. Tampoco tenía que dedicar tiempo a descubrir cómo enseñar o escribir, ¡porque es algo que hacía todas las semanas!

En lugar de pasarme un año (o más) dando vueltas, en menos de un mes la empresa estuvo funcionando. En menos de 4 meses era super claro que había descubierto cómo elegir un negocio rentable y adecuado para mí, y ese mismo proyecto -Superhábitos- fue el que me permitió dejar mi trabajo para dedicarme 100% a emprender.

De hecho, el blog evolucionó de ser un sitio con consejos de productividad a una sitio con consejos para emprendedores, y ahora se ha convertido en una Comunidad que reúne a +25.000 personas todos los meses.

Pero eso sólo tiene sentido porque esa elección también venía del otro factor clave…

Criterios para elegir un negocio
Un factor clave para elegir un negocio es pensar: ¿qué habilidades o conocimientos YA tengo, y puedo aprovechar?

B) La empresa adecuada debe estar conectada con tus objetivos personales de largo plazo.

Hay una realidad: si no sabes a dónde quieres llegar con tu vida, lo más probable es que en algún punto «descubras» que llevas varios años gastando tiempo/energía en cosas que realmente no te importan… ¡y que te encuentras muy lejos de lo que es realmente importante para TÍ!

Esta es una verdad universal, y afecta a todas las personas por igual.

En el caso de muchas personas, eso toma la forma de pasarse años trabajando en una empresa o trabajo que no les importa, y dejando de lado sus verdaderas pasiones (tal vez incluso sus relaciones familiares más importantes).

Esto es algo demasiado común, y de hecho el 80% de las personas en relación de dependencia no disfrutan de su trabajo diario.

En el caso de otras personas, esto toma la forma de quedar esclavizados en un negocio que realmente no disfrutan, o que no se conecta con lo que querían lograr en el largo plazo. Piensa, por ejemplo, quedar atado a una confitería cuando tu sueño era viajar por el mundo. O iniciar un negocio que te obliga a viajar cada semana… ¡cuando tu sueño era poder estar cada tarde con tus hijos!

No importa cuál sea tu sueño, lo que importa es que el negocio que elijas esté en armonía y conectado con él.

Así, trabajar en el negocio adecuado tendrá doble motivación: generar ingresos, y también ir haciendo realidad la vida de tus sueños.

En mi caso, siempre soñé con iniciar un negocio que me permita estar en mi casa con mi familia, aquí en Salta. Ese era el objetivo #1.

El objetivo #2 era poder hacer algo que, desde aquí, me permitiera ayudar a muchas personas en muchos lugares diferentes, y viajar cada tanto sin preocuparme. El objetivo #3 era que fuera un negocio que me permitiera seguir desarrollando 2 de mis pasiones: escribir y enseñar.

Hoy estoy escribiendo esto desde el comedor de mi casa, con un mate en la mano y habiendo vuelta de un viaje de un mes y medio hace dos semanas.

Todo esto me sonaba como un sueño imposible cuando empezamos. De hecho, en ese momento hubiera estimado que llegar a esto me iba a tomar entre 7 y 10 años… y aún no pasaron 4.

Saber cómo elegir el negocio adecuado y poner esas herramientas en práctica es algo que puede cambiarte la vida. 

¡Y es hora de poner manos a la obra!

Cómo elegir tu idea de negocio: 5 pasos prácticos

Paso #1: Identificar cuál es tu área de emprendimiento

Una vez que decides emprender, tu siguiente paso cómo emprendedor es aclarar cuál es tu área de emprendimiento. Esto significa identificar cuál es la industria dentro de lo que quieres trabajar.

Mejor aún: aclarar cuál es el rubro y cómo planeas diferenciarte dentro de él.

Hace unos días consulté a varios emprendedores amigos, y todos me dijeron que el mejor test para saber qué negocio poner es el de la Chispa interior, que es parte de el Kit Gratuito para Suscriptores, que puedes descargar gratis haciendo click aquí.

Esta guía está basada en nuestra charla TEDx (la parte puntual empieza a los 04:30):

Esta Guía para emprender parte de la idea de descubrir tu Chispa (también llamada en otros contextos «Ikigai», voz, área de emprendimiento, etc.).

Después de todo, identificar en qué área elegir tu negocio va de la mano de identificar en qué área haces tu mejor trabajo, y eso viene de la mano de tus talentos, pasiones, principios y capacidad de resolver necesidades de otros:

Tus pasiones: hacemos un mejor trabajo cuando estamos haciendo algo que disfrutamos.

Si algo nos gusta y apasiona lo realizamos mejor. Eso significa que podemos encontrar ideas y oportunidades con más facilidad, porque tenemos mucha experiencia y conocimiento acumulado en el tema.

Si me gustan las películas, por ejemplo, seguro que he pasado mucho tiempo aprendiendo del tema. Tal vez sea leyendo las críticas en el periódico, o tal vez viendo vídeos en Youtube sobre las películas actuales, o que analizan escenas o tramas.

Como es algo que me gusta, el tiempo durante la semana lo aprovecho para ver películas y me gusta organizar ideas al cine con mis amigos.

Entre las lecturas, el ver vídeos y la cantidad de películas que veo, seguramente sé más que el 90% de las personas sobre cine.

Además me entusiasma mucho el tema, así que siempre estoy con energías para hablar de eso, sin necesidad de prepararme o proponérmelo. Ayudo a mis amigos a elegir qué película ver, y tengo buen olfato sobre qué películas van a ser un éxito y cuáles no.

Esto es más claro aún si pensamos el caso contrario: cómo nos iría si nos metemos en algo que nos disgusta o parece aburrido. Seguro nos distraemos con facilidad y buscamos excusas para postergarlo o hacer algo en el medio (me pasa con las tareas administrativas y contables).

En resumen…

Lo que nos apasiona = conocimiento acumulado + motivación natural para avanzar.

Tus talentos: cuando hacemos algo en lo que somos buenos naturalmente.

Todos tenemos talentos: actividades que nos resultan más fáciles que a la mayoría de las personas.

Son actividades en la que nos destacamos sin darnos cuenta. Puede que sea por algo de nuestra personalidad, por el contexto en el que crecimos o por actividades que son parte de nuestro día a día.

Hay talentos de los más variados. Tal vez sea algo muy concreto “Juancito siempre tuvo facilidad para la matemática”. Tal vez sea algo aparentemente poco relacionado a los negocios “A Helena los amigos siempre le piden consejos”, o “A Xavi no hace falta decirle qué te pasa, el sólo se da cuenta de cómo te sentis”.

Puede incluso que parezca completamente irrelevante: “Kathya puede imitar a todos los famosos”, o “Daniel tuvo el armario organizado perfecto toda la vida”.

No importa cuál sea el origen, un talento es una ventaja competitiva.

Si nuestro esfuerzo se dirige a tareas en que somos buenos naturalmente y que se nos dan fácil los resultados vienen mucho más rápido que si intentamos adentrarnos en áreas que nos resultan muy ajenas o desafiantes.

Por supuesto que hay que seguirnos desarrollando con el tiempo, ¡pero no tiene sentido desaprovechar este gran punto de partida!

Importancia de elegir el area de tu emprendimiento

Tus principios: cuando hacemos lo correcto.

Dentro de la Chispa, este es el punto más difícil de explicar, pero impacta directamente en los resultados.

Explicarlo teóricamente es difícil, pero lo entenderás automáticamente si lo observas de forma práctica: ¿Alguna vez hiciste un trabajo con el que no estuvieras moralmente de acuerdo? ¿Algo que fuera directo contra tus creencias o principios? ¿O trabajaste con alguien que no compartiera tus códigos o valores?

A la mayoría de las personas esa situación les tocó en algún momento. Hacer algo contra tus principios es una formula segura para quedarte sin energías y sin creatividad.

Yo sufría esto cada día trabajando como abogado, y la verdad es que cada día al volver a casa me sentía pesado, angustiado. Lo terrible es que es algo que le pasa a demasiadas personas.

Para algunas se trata de no compartir los valores de una empresa, y para otras viene por el lado de pensar que el producto que venden no es realmente bueno o necesario. Tal vez es simplemente toma forma de sentir que no hay un propósito o sentido en lo que estamos haciendo.

Trabajar en contra de tus principios, o sin propósito, es pesado. Nadie hace su mejor trabajo bajo esas circunstancias.

Ahora piensa en el escenario opuesto: ¿alguna vez tuviste la oportunidad de dedicar tiempo o trabajar en una causa o proyecto en el que creyeras? Puede ser cualquier tipo de proyecto, siempre que hayas sentido que al hacerlo estabas haciendo del mundo un lugar mejor. Tal vez fue ayudar a un amigo a conseguir trabajo. O ayudar en la iglesia de tu barrio, o en una organización social.

¿Cómo te sentiste en ese momento? ¡Seguramente lleno de alegría y energías! Por eso para hacer nuestro mejor trabajo debemos realizar tareas que creamos que son buenas y correctas. Necesitamos ver que hay un propósito bueno de fondo en el proyecto, porque allí sale nuestra mejor versión.

Cuando nuestra conciencia no sólo está tranquila sino que además nos motiva las actividades fluyen y los resultados aumentan.

Las necesidades de otros: cuando nuestras actividades resuelven problemas de otros.

Ya hablamos de que la esencia de un negocio es ayudar a otros.

Pero la rentabilidad no es el único efecto que tiene enfocarnos en las necesidades de otros, ¡sino que también nos hace más productivos!

En primer lugar, ver en qué cosas YA ayudamos a las personas nos orienta para elegir nuestro negocio. Si analizamos en qué tipos de tareas, problemas o actividades somos útiles actualmente, vamos a tener una muy buena orientación sobre en qué negocio seríamos atractivos para otros.

Hay decenas de ejemplos de esto entre los emprendedores de Superhábitos…

  • Si mis amigos ya me piden consejos a la hora de ponerse en forma, entonces seguramente si creo un servicio profesional para ayudar a otras personas con el mismo tema me recomendarán (y contratarán). Eso es lo que le pasó a Nora.
  • Si en la empresa en que trabajo me valoran porque soy bueno negociando precios con proveedores, entonces seguramente si creo un curso sobre eso para emprendedores será muy útil. Eso es lo que le pasó a Enrique.
  • Si en cada reunión mis amigos me preguntan cómo hago para organizarme y viajar tanto, entonces un servicio de organización de viajes por mí seguro les llamará la atención. Es lo que logró Jeanette.
  • Si mis amigos ya me piden consejos a la hora de organizarse y manejar proyectos complejos, entonces seguramente les interesará el material que genere sobre productividad. Eso fue lo que nos pasó a nosotros al empezar.

Si hay problemas que ya resuelves en tu entorno, o temas en los que las personas te buscan, ¡eses un indicador de tu área de emprendimiento!

Además, enfocarte en necesidades de otros te da claridad y la oportunidad de profesionalizarte.

En lugar de estar perdido entre preguntas (¿El producto es demasiado simple? ¿O clomplejo? ¿Mi marca es clara? ¿El precio es razonable? ¿Muy barato? ¿Muy caro?), ¡las respuestas se aclaran!

Esto es porque en lugar de tener un solo punto de vista (el nuestro), pasamos tener varios, y al igual que un pintor, podemos usar esos puntos para crear perspectiva y ver con mayor claridad qué es importante, qué requiere más atención y qué debe quedar fuera de foco.

Al mismo tiempo, al hacer algo para otros generamos ganancias, y eso hace posible que el negocio elegido sea rentable. El tener dinero, finalmente, nos permite aumentar aún más nuestra capacidad de ayudar a las personas.

Al generar ingresos podemos profesionalizarnos, dedicar más tiempo, equiparnos mejor y capacitarnos.

¡Ahora piensa cuán rentable y competitivo es un negocio que cruce estos 4 factores!

Un negocio que te guste a ti está bien.

Un negocio que te guste a ti, y en el que tus talentos hacen una diferencia, está MUY bien.

Un negocio que te gusta a ti, que aprovecha tus talentos y en el que ves una causa importante es algo FANTÁSTICO.

Y si además de todo, este negocio cambia la vida de otras personas, ¡entonces haz encontrado tu área de negocios!

Es un lugar donde resaltarás naturalmente, en la que estarás feliz de ir a trabajar todos los días, motivado por cambiar el mundo y donde la vida de tus clientes mejorará a diario.

La clave para elegir un emprendimiento: tu chispa

Cuando los 4 elementos que mencionamos se superponen encontramos lo que en Superhábitos llamamos “Chispa”. Cada hora que pasamos utilizando esa chispa nos da resultados que no se obtienen de ninguna otra manera, tanto en calidad como en cantidad. 

Es también el área en que debes realizar tu negocio.

Cuando eliges un emprendimiento que se de dentro de esta área estás eliminando la mayoría de los obstáculos a que podrías enfrentarte, como agotarte o cansarte de tu negocio, sentirte abrumado por los desafíos, que te cueste explicar o justificar lo que haces y, finalmente, el crear productos o servicios que nadie realmente quiera.

Como dijimos al empezar, esto es cierto tanto para quien está por dar el salto como para quienes ya tenemos un emprendimiento. Es importante revisar, cada tanto, que estemos construyendo dentro del área en que se cruzan pasiones, talentos, principios y necesidades de otros.

Si descubrimos que no lo estamos haciendo debemos preguntarnos: ¿cómo puedo ajustar mi negocio actual a esta nueva idea?

Pivotear y mejorar un proyecto existente a las ideas de este Post va a producir cambios drásticas inmediatamente.

Sólo cuando las 4 dimensiones se encuentran en armonía y enfocadas en una actividad vamos a sacar el jugo a cada momento que tengamos.

Cuando trabajamos sobre la Chispa liberamos nuestro potencial para generar oportunidades nuevas, realizar aportes únicos y diferenciarnos en el mercado.

¡Y por eso el negocio adecuado depende de cada persona! No hay dos personas con la misma chispa, y por lo tanto no hay dos personas para las cuales el negocio ideal sea exactamente el mismo.

Si aún no tienes clara tu área de emprendimiento, ¡entonces es momento de poner manos a la obra! Si quieres descubrir tu chispa y el área en la cual iniciar tu negocio, haz click en el botón naranja para acceder al Kit y el test completo:

ACCEDER AL KIT GRATUITO

Paso #2: Cómo elegir una idea que sea rentable

Una vez que identificas tu área de emprendimiento, los pasos que siguen para seleccionar una idea de negocio se enfocan en ir afinándola para llegar a un modelo de negocio claro.

El primer criterio para elegir un modelo de negocio debe ser su rentabilidad: ¿es algo con lo que podré generar los ingresos que necesito/quiero? ¿hay suficientes personas como para que el negocio se sostenga? ¿están dispuestas a invertir dinero en lo que quiero crear? ¿y al precio que yo pienso?

Para completar esta parte del proceso de selección de la idea, hay una serie de recursos y técnicas clave que puedes aprovechar.

A continuación los dejo ordenados, con links para que puedas explorar cada uno en profundidad:

Con estas herramientas técnicas lograrás contestar las dos preguntas clave: ¿tengo realmente una buena idea de negocio entre manos? ¿y qué aspectos debo tener en cuenta para desarrollarla?

Si tienes clara la respuesta a ambas preguntas, entonces estás listo para pasar al tercer paso.

Paso #3: Cómo elegir un negocio adecuado al estilo de vida que quieres

Ya hablamos de que todo el esfuerzo para seleccionar tu emprendimiento y convertirlo en una realidad sólo tiene sentido si el resultado es algo que te llena de alegría.

Si quieres viajar mucho, entonces lo mejor es adecuar el modelo de negocio a uno que te permita lograrlo. Si lo que te hace feliz es trabajar con personas «en vivo» es clave que tu negocio lo incluya. No importa si quieres trabajar en casa o desde un local, ¡lo importante es que tus objetivos personales estén alineados con tu negocio, y viceversa!

Para eso:

  1. Lo primero es que aproveches este Podcast y definas con claridad tus objetivos y visión personal. Sin una visión clara, jamás podrás diseñar un negocio que te lleve a ella ;)
  2. Lo segundo es retomar esa visión, y preguntarte: ¿qué consecuencias tiene sobre mi negocio? Principalmente, preguntarte:
    • ¿El negocio que he pensado hasta ahora, es coherente con esa visión?
    • Si no al 100%, ¿por qué? ¿Qué cambios debería realizar para lograrlo? (¡Y poner esto por escrito!)

Para esta etapa del proceso, es importante que veas que dentro de un área de emprendimiento hay cientos de posibilidades de negocios. Piensa, por ejemplo, que llegaste a la idea de ayudar a jóvenes a mejorar sus habilidades de cocina, enseñándoles a comprar mejor, cocinar más rico y más rápido.

Elegir el negocio adecuado: estilo de vida

Incluso después de haber validado la idea, quedan cientos de variantes entre las cuales seleccionar tu idea de negocio:

  • Puedes hacerlo a través de cursos presenciales, si disfrutas de trabajar de cerca con personas.
  • Puedes hacerlo a través de cursos digitales, si disfrutas de la posibilidad de viajar.
  • Puedes hacerlo a través de un Blog o Revista, si disrutas escribir.

¡O puedes combinar todas estas opciones!

Aún más, dentro del mundo de la cocina y ayuda a jóvenes que no comen bien por no saber o no tener tiempo, también podrías montar un servicio de delivery (si es que te gusta cocinar, pero no enseñar), o incluso crear una confitería que les resuelva ese problema en su barrio.

Todas estas son opciones reales, y negocios que existen, y la pregunta para elegir entre ellos es cuál te permitirá tener el estilo de vida que sueñas.

Paso #4: Hablar con empresarios de tu región y del rubro

Una vez que tienes definida tu área de emprendimiento (chispa), que aclaraste el modelo de negocio y que te aseguraste de elegir un negocio adecuado a tu estilo de vida, el paso #4 es hablar con empresarios para profundizar en tu conocimiento.

La idea de este paso es simple: antes de seleccionar una idea de negocio, es bueno hablar con personas que hacen algo similar, para aprender un poco de su experiencia. Esa experiencia te permitirá ver detalles importantes que escapan a la mirada del público general, y de cualquier persona que no haya emprendido en el rubro.

Un empresario te permitirá ver con claridad:

  • Qué pasos dar para iniciar un negocio de ese tipo en tu región.
  • Cómo es la vida cotidiana de un dueño de negocio de ese tipo: ¿cómo son sus horarios?
  • Evitar errores que ellos ya cometieron.
  • Ver «desde adentro» nuevas perspectivas o tendencias de la industria: ¿es una industria que está creciendo? ¿o están enfrentando algunos problemas?
  • Un poco de la estructura que debes montar, y cuáles son los aspectos esenciales a tener en cuenta.

Poder hablar con un empresario o emprendedor antes de iniciar un negocio es un paso importante, y una ventaja competitiva enorme. De hecho, es el motivo central por el que en Superhábitos siempre reforzamos la importancia de buscar o contratar mentores.

En nuestro caso, por ejemplo, empezamos Superhábitos teniendo la posibilidad de aprender y conversar con Scott Dinsmore, de Live Your Legend. Cada correo o charla con él implicó cientos de horas ahorradas, y cada uno de sus consejos sobre material para estudiar o aprender fue un consejo acertado al 100%.

Los empresarios con los que necesitas hablar en esta etapa deben cumplir -en la medida de lo posible- con 2 características:

  1. Ser empresarios de tu industria. «Industria» aquí quiere decir rubro, temática o tipo de negocio. Mientras más parecido sea el negocio que tiene la persona al que tú sueñas establecer, ¡mejor! Puede ser que no tengas alguien que tenga un negocio igual, y en ese caso lo bueno es ir buscando los negocios los más similares posibles. Si estás pensando un negocio de comida Mexicana, y no conoces a nadie con quién hablar, entonces puedes buscar a otra persona que tenga un negocio de comida de un país (como comida India), o directamente un negocio de comidas.
  2. Ser de tu región. La idea aquí es simple: los negocios cambian de acuerdo a la región, país, estado o provincia, ciudad e incluso barrio. Cada uno de esos cambios llevarán a cambios respecto de qué es lo que funciona. Esto es cierto para aspectos «obvios» (como lo legal, de idioma o tributario), pero también para otros más sútiles (tipos de imágenes que funcionan, colores, formatos, etc.). Por eso el objetivo es hablar con un empresario tan cercano a tu región como sea posible, ¡minetras más específico mejor!

Puede que no conozcas ningún empresario de tu industria y región, ¡pero no dejes que eso te detenga!

Siempre puedes utilizar google (o tu guía telefónica) para buscar personas y contactarlas. Además, hablar 1 a 1 no es la única forma de aprender de su experiencia. También puedes investigar sobre empresarios y su historia, y adquirir así mucho del conocimiento que necesitas.

Como elegir un negocio - paso 4
Hablar con otros empresarios no sólo sirve cuando para elegir un negocio, ¡sino también para hacerlo crecer!

Por eso es que en el Podcast tratamos de reunir experiencias de diferentes industrias, para dar una perspectiva amplia de las diferentes opciones, sus ventajas y desventajas.

Aquí tienes un par de entrevistas que te pueden servir para empezar a sumergirte en tu historia:

También puedes ver nuestra experiencia pasando de 10 a 100 clientes, y luego escalando a 100.000 personas en Superhábitos.

¡Y estas son sólo algunas de las entrevistas disponibles! Puedes ver todas las entrevistas que hemos realizado hasta ahora, y descubrir un empresario con el cual hablar haciendo click aquí.

Paso #5: Cómo pasar de elegir una buena idea a tener un buen negocio

Siguiendo los pasos hasta aquí habrás logrado el primer hito, y cumplido el objetivo: no sólo llegaste a una idea de negocio adecuada para ti, sino que sabes que estás eligiendo un emprendimiento rentable, y que analizaste todos los criterios que deben ser tenidos en cuenta para elegir un negocio.

Con eso, es momento de poner manos a la obra para hacer realidad tu idea. Una idea perfecta sin ejecución no sirve para nada. Que una idea de negocio sea buena no significa que se realizará sola o de forma automática, ¡sino que debes trabajar en ella de forma enfocada!

Para eso, es fundamental fijar un período durante el cual auto-comprometerte a mantener enfocado en esa idea. Sin esto, te encontrarás saltando de idea en idea a la primera dificultad o problema que surja, ¡y eso no está bien, porque cualquier idea encontrará obstáculos, y si saltas cuando aparezcan nunca verás los resultados!

Para este paso he reunido 3 herramientas que ayudarán a mantenerte enfocado y atravesar el proceso que hay entre la idea y los primeros resultados:

  1. Primero, este Podcast que grabaron Santi y Lu sobre cómo mantenerse concentrado en una idea y no saltar a otras.
  2. Segundo, esta conversación sobre cómo utilizar tu misión personal y visión para organizarte día a día, y avanzar de manera enfocada
  3. Finalmente, si te llegas a cuestionar si deberías abandonar un proyecto, este episodio te permitirá decidir si dejarlo es realmente la mejor decisión.

¡Momento de hacer tus propios ejercicios para elegir un negocio rentable, que te entusiasme y con el que puedas crecer!

Esta es la guía sobre cómo elegir un negocio que me hubiera gustado tener cuando estaba dando vueltas con mis ganas de emprender en 2013.

Pero es una guía inútil si no la aplicas, y si no haces todas las preguntas que necesites para despejar tus dudas :)

Si quieres llegar a una idea de negocio que te traiga resultados, simplemente debes seguir los pasos aquí, y hacer cualquier pregunta que tengas en los comentarios, ¡responderemos todas y cada una!

¡Manos a la obra! ¡Y que sea por encontrar un negocio que ames!