Jimena se levanta a las 7am. Desayuna, se da una ducha veloz, no tiene mucho tiempo.
Sale para ir al trabajo. Su oficina está bastante lejos de su casa, así que viaja más o menos una hora en colectivo en hora pico.
Pasa 8 horas diarias entre cubículos y pantallas. Sólo tiene 20 minutos para salir a tomar aire, ver el sol.
Sólo le falta la tesis para terminar su carrera universitaria y siempre quiso tener su propio negocio y trabajar de lo que le gusta, pero nunca comenzó. Llega a su casa muy cansada, y sólo tiene ganas de comer algo, ver televisión y terminar el día.
Jimena no está contenta con su vida. Está agotada de la rutina.
No tiene un rumbo claro y está trabada.
Lo que no te estoy contando es que esa era Jimena hasta hace unos meses.
Ahora, se levanta a las 5:30am. Dedica los primeros minutos de su día a reflexionar desde su misión personal (si, tiene una misión personal) y revisar su visión a 5 años. La imagen que creó la entusiasma y motiva muchísimo.
Antes de la 6am. ya escribe para su tesis. Avanzando todas las mañanas un poco, la terminará para fin de año.
Recién ahí desayuna, se ducha, va al trabajo…
Ahora, sus días tienen mucho más sentido.
Cada actividad es una elección y cada cosa que decide hacer o dejar de hacer la acerca a sus objetivos más importantes.
Está enfocada, llena de energías y con un propósito claro.
Está por comenzar un blog, y en vez de seguir postergándolo, ¡tiene tantas ideas que aún no se decide cuál la entusiasma más!
Quiere vivir de lo que le gusta, y eso le da la certeza de que los días en su trabajo actual están contados. ¿Cuántos más serán? Eso depende 100% de ella.
¿Qué le pasó a Jimena?
¿Qué comió que de repente cambió así su vida?
¿Qué truco de magia hizo para levantarse a las 5:30am. y además tener energías a la tarde para investigar sobre cómo hacer un blog?
No, no esmagia.
Es el poder de los hábitos: cambios increíbles, con pasos muy pequeños.
En los últimos meses, Jimena se comprometió consigo misma a transitar un camino de pequeños pasos. Se propuso incorporar los hábitos que le permitan estar ordenada, tener más foco y energía, y comenzar su negocio.
Así, durante un mes entero se dedicó a escribir su Misión. Luego, construyó una imagen de cómo desea que sea su vida a 5 años y aprendió a organizarse en base a lo importante.
Quiere terminar su carrera, quiere disfrutar más su trabajo, quiere tener más energías, quiere comenzar su propio negocio.
Ahora sabe que tiene tiempo para dedicar a su proyecto.
Tiene claro que su trabajo actual es pasajero, y lo disfruta más porque así lo elige.
El primer paso es claro y muy simple cuando tenés una imagen fuerte de lo que más querés.
Más energía, foco y tiempo
Ese es el poder de la visión: conectarte y re significar todo lo que haces o dejas de hacer en función de ese proyecto más grande que tanto deseas y muchas veces postergas.
Y esto se multiplica con la organización que se enfoca en que pongas tu tiempo y energía en lo importante y descartes el resto. Revisar seguido esa imagen, y priorizar lo que hacemos día a día en función de la visión, nos da la posibilidad de que cada pasito nos acerque a ello (y dejar de andar en automático).
Jimena está organizada, sabe equilibrar y es ahora una persona más determinada que tiene claro a dónde va.
Y fue simple.
Lo hizo con 15 minutos cada mañana y media hora los domingos.
El camino natural para ser un buen emprendedor, como esos que tanto admiramos, es tener claro hacia dónde vamos y hacer las cosas importantes para ello.
Los buenos emprendedores valoran su tiempo y saben el potencial que tienen para resolver problemas.
Los buenos emprendedores saben decir que no. Saben que no se trata de tener más tiempo, sino de priorizar lo importante en el tiempo que tienen.
Saben no llenarse de actividades que les demanda mucho esfuerzo y tiempo pero no les trae los máximos resultados.
Trabajan duro en lo importante: en eso que les da resultados, y dejan ir el resto.
Son pequeños pasos muy claros.
Jimena lo experimentó y le trajo resultados asombrosos.
Muchas otras personas están más organizadas, están equilibrando su familia, su trabajo, su emprendimiento… y están dando el primer paso, comenzando sus proyectos.
Porque dar el primer paso es fácil, si tenés una comunidad que te acompaña, personas que te aconsejan y las herramientas adecuadas.
Jimena tuvo todo eso porque está haciendo el Programa Convertite en Emprendedor. No inventé esta historia, es un caso real de una persona que está haciendo el Curso. Y como ella, hay muchos más.
Al ejercitar un hábito por mes, al cabo de 30 días logras resultados increíbles sin demasiado esfuerzo o tiempo.
Por eso Jimena pudo generar cambios tan grandes en un par de meses. Y por eso está lista para pasar a lo que sigue.
No saber algo no es un obstáculo
Con el Rumbo claro, es hora de fortalecer una por una las 4 dimensiones. Nuestras 4 dimensiones son cuatro músculos (mental, físico, espiritual y social) a los que es importante fortalecer.
El primero que ejercitaremos en el Programa será el Mental: se viene el mes de Aprender a Aprender.
Incluso con un propósito claro, una imagen que te entusiasma, y un ritual de organización semanal, se presentan situaciones a las que tenemos que responder y no sabemos cómo: puede que no sepamos manejar un software particular, no tengamos conocimientos sobre determinada temática o sobre el modelo de negocios que queremos implementar.
Los buenos emprendedores saben que no saber algo no es un obstáculo. Cuando se les presenta una situación o un problema a resolver, se dedican a aprender.
Hay muchas estrategias para aprender y resolver situaciones. Lo primero es no frenarse ante algo que no sabemos.
Podes profundizar en el Modulo de diciembre del Programa.
Con una pequeña inversión, unos minutos diarios y el empuje de una Comunidad, lograrás resultados transformadores.
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El jueves Mati te contará más sobre todo lo que tenemos preparado para el Mes de Aprender a Aprender.
Hasta que llegue, te puedo adelantar que al final de este mes tendrás las herramientas para resolver cualquier situación que se te presente. De ahí en más, no saber algo no será un obstáculo ni la razón por la cual tu proyecto no funcione.
Cuando tenés las herramientas para aprender lo que haga falta ¡nada te puede frenar!
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Hasta el Jueves, contáme en los comentarios ¿qué te está frenando de comenzar tu proyecto?
De lo que logró Jimena, ¿Qué te gustaría lograr en tu vida?
¡Que tengas una linda semana!
Lu.
