Vista desde el Mirador del Condor y hacia el dique Potrero de los Funes

Las 4 habilidades que permiten incorporar hábitos

El problema de nuestros tiempos es que el futuro ya no es lo que era.

Paul Valéry.

 

Si tuvieras que elegir cuatro habilidades que desarrollar a partir de ahora, ¿cuáles serían? ¿Algunas profesionales? ¿Idiomas? ¿Liderazgo o comunicación? ¿Y si te dijera que hay 4 que son absolutamente fundamentales y que no se te cruzaron por la cabeza?

Esas 4 habilidades fundamentales son la Autoconciencia, la Voluntad Independiente, la Creatividad y la Conciencia Moral. Desarrollarlas es un paso necesario e ineludible para destapar tu potencial. Todas las otras habilidades o conocimientos pueden desarrollarse luego de estas.

Sin las 4 fundamentales todo lo demás se vuelve más complejo.

Me topé con esta idea por primera vez al leer el libro «Los 7 hábitos de las Personas Altamente Efectivas», de Stephen Covey. Con el tiempo, sin embargo, he ido encontrando que son ideas transversales en la gran literatura. Con nombres más o menos distintos las mencionan Aristóteles, Santo Tomás, Margarite Yourcenar en «Memorias de Adriano» y Andy Freire en «Pasión por Emprender».

Y esto por un motivo simple: son 4 talentos que nos vuelven propiamente humanos. Liberan nuestro potencial. Su ejercicio nos permite construir hábitos y proyectos nuevos.

 

Pero, y he aquí el principio del problema, los sistemas educativos tradicionales asumen que son algo «de carácter». Las escuelas de la Era Industrial se basaron en que hay personas que tienen estos talentos y otras que no, así que no vale la pena tratar de enseñarlos. Las frases «es que él es muy creativo», «hay algunos que nacen con estrella y otros estrellados» o «ella tiene un carácter insufrible» parten de esta base.

Además, el hecho de que no se cultivaban pasaba casi desapercibido en una época en que la mayoría de los trabajos eran automáticos, predominantemente técnicos y gozaban de estabilidad.

Pero esos días quedaron atrás. Como jóvenes, nos enfrentamos a una crisis enorme: vamos a escuelas y universidades que nos «preparan» para un futuro que nadie sabe exactamente cómo va a hacer. Se hace difícil trazar una carrera una vez recibido porque no está claro cómo manejar el ritmo del cambio y la competitividad global.

La Era de la Información que nos toca vivir se caracteriza por tener al conocimiento como principal recurso y la capacidad de adaptarse e innovar como habilidad número uno.

La novedad, transitoriedad y diversidad ponen al límite nuestra capacidad de adaptación y nos fuerzan a adaptarnos o quedar relegados.

Si queremos poder adaptarnos, y tener auténtica seguridad en el futuro, debemos empezar por desarrollar estas habilidades.

Con Lu y Alvaro en el Mirador de Potrero de los Funes
Igual que en un viaje, el tomar distancia y ver todo el panorama nos ayuda a orientarnos mejor (Mirador del Condor, Potrero de los Funes)

 

Cómo podemos empezar a cultivarlas

1) Auto-consciencia: Poder Vernos.

Es la capacidad de tomar distancia de nosotros mismos y descubrir cuáles son nuestras emociones, estados de ánimo, pensamientos o sensaciones. Todos poseemos está habilidad, y entra en ejercicio al decir algo tan simple como «estoy molesto».El poder darte cuenta de que estás molesto (y que no es tu estado natural) es una herramienta invaluable para el desarrollo de hábitos.

La auto-consciencia, como el oído, puede entrenarse para descubrir patrones o sonidos más finos, y así poder distinguir lo que realmente nos pasa. Por ejemplo, no es lo mismo estar incómodo que molesto. El poder observar lo que estamos pensando, poner en evidencia nuestros paradigmas y ver la forma en que reaccionamos ante ciertos eventos es el primer paso para poder cambiarlos.

Todas las sensaciones y emociones son indicadores de que algo sucede. Tenemos que descifrar qué y usarlo para construir nuestro camino.

Cómo empezar a desarrollarla: escribir todos los días a la noche un diario. En ese momento identificar cómo te sentís y los motivos. Es un momento ideal, también, para ejercitar la gratitud y pensar en 3 cosas lindas que te hayan pasado en el día.

 

2) Voluntad Independiente: Poder Elegir.

Este es, para la mayoría de los pensadores, el factor que nos hace auténticamente humanos: podemos elegir. Siempre.

El poder elegir implica libertad y posibilidades, y ello implica también responsabilidad y consecuencias.

Cuando dejamos de construir con nuestras elecciones abrimos la puerta para ser construidos desde las elecciones de otros, o simplemente desde nuestras circunstancias. Pero eso, incluso, es una elección. Uno de mis pensamientos favoritos es «incluso si estamos entre la espada y la pared, tenemos que elegir entre la espada y la pared».

No hay situación, por extrema que sea, en que esa capacidad desaparezca.

Forma de empezar a desarrollarla: Detectar en qué momentos te quejas (y por lo tanto atribuyes la responsabilidad de lo que sucede a lo que está fuera), y en ese instante frenar, pensar qué podrías hacer al respecto y enfocarte en eso.

 

3) Imaginación: Ver lo que aún no existe.

Esta habilidad está de moda, sólo que con otro nombre: creatividad. Se trata de la capacidad de crear en nuestra mente escenarios que aún no existen o nuevas soluciones a problemas. La creatividad es un arma infaltable para cualquier persona o empresa en el Siglo 21.

Y esto por un motivo simple: para alcanzar algo esto primero tiene que ser un objetivo. Para que esto sea un objetivo primero hay que verlo como posible, lo cual implica imaginar la situación, el objeto creado o el logro alcanzado.

Forma de empezar a desarrollarla: VisualizarEscuchar a Bachrach, aprender cómo funciona tu cerebro y hacer ejercicios de Creatividad.

 

4) Conciencia Moral: Seguir tu Brújula Interna.

En Superhábitos creemos en los Principios Naturales. Esto significa que cada cosa tiene una naturaleza y que la mejor manera de sacar nuestro potencial humano es comprendiendo las reglas que lo dominan.

Sin embargo, para conocer esas reglas no es necesario estudiar infinidad de libros. Empieza por algo mucho más sencillo: escuchar a nuestra intuición interna. Desde chicos nos ha pasado de sentir que hay cosas que «están bien» y otras que «están mal». La conciencia moral es esa brújula. Y tiene un rol clave, cuando se la comprende bien.

Así, si vemos a lo bueno como una obligación para con otros, o como algo que no tenemos que hacer para evitar que uno o más Dioses nos castiguen, esta forma de conciencia no tiene muchos efectos personales. Sí, en cambio, comprendemos que lo bueno es bueno para nosotros, y que lo malo es malo para nosotros, nos vamos a dar cuenta de la importancia de este don.

El éxito a largo plazo se obtiene honrando los compromisos, poniendo a las personas antes que a las cosas y a las actividades que nos construyen antes de las que nos distraen. Si intentamos racionalizar esto en cada paso que damos es muy difícil que operemos con velocidad y agilidad. Escuchando a nuestra conciencia moral, sin embargo, el proceso se vuelve veloz. No necesitamos racionalizar, sino sensibilizarnos y comprender los impulsos que vienen de ella.

Cómo empezar a desarrollarla: hacé una declaración de misión y un listado de tus principios. Releelos y repensalos una vez por semana. De a poco, cuando tengas que tomar decisiones, van a venir en tu ayuda.

 

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Hay un secreto final con respecto a estas 4 habilidades: son inter-dependientes.

El desarrollo de una de las mismas potencia a las restantes y, cuando se desarrollan en conjunto, se transforman en una base única para desarrollar nuevos hábitos, adquirir habilidades o enfrentarse a retos.

Así, cuando una persona las cultiva:

  • Puede mejorar sus paradigmas de forma constante, ya que es capaz de verlos y contrastarlos con la realidad.
  • No es presa de sus emociones ni estados de ánimo. Las identifica y usa a su favor para leer las situaciones y encontrar áreas a pulir a futuro.
  • Construye en cualquier circunstancia. Entiende que siempre hay posibilidades y, así, los resultados no dependen de factores externos o pre-determinados, sino de la respuesta a ellos.
  • Para construir, puede ver y sopesar múltiples escenarios aún no existentes. El ver posibilidades en lugar de problemas permite aprovechar las oportunidades.
  • Puede tomar buenas decisiones con velocidad porque tiene claro sus guías básicas al actuar.

 

Foto de todos en el Encuentro Superhábitos de Septiembre 2014
Una de las mejores formas de ver nuevas posibilidades, recordar todo el tiempo tu misión y no dejarte llevar por las circunstancias es tener una Comunidad que te lo recuerde :) (Encuentro Superhábitos Septiembre de 2014)

Queremos ayudarte a desarrollar tus habilidades básicas y más

Las 4 habilidades fundamentales de las que te hablé son la base para poder desarrollar los hábitos que te permitan encontrar equilibrio y organizarte, tener claro qué es lo que más te importa, poner en marcha tus proyectos aportando valor y solucionando problemas.

Los hábitos correctos son clave porque son coherentes con los principios naturales y con la naturaleza humana.

Estos hábitos están inter-relacionados, son inter-dependientes y conforman un sistema. Esto significa que no puede mirarse ni desarrollarse uno sin pensar en el otro. Se influencian mutuamente, se afectan y se potencian. (Por ejemplo, no podemos desarrollar el hábito de levantarnos temprano si tenemos incorporado el hábito de dormirnos muy tarde).

La naturaleza humana y la naturaleza de los hábitos indica que existen procesos naturales, que son paso a paso y toman tiempo para interiorizarse y mejorarse, que no podemos alcanzar transformaciones significativas y crecer integralmente si no nos comprometemos con los procesos y con el largo plazo.

Por todo esto, decidimos hacer un Curso en el que puedas comprometerte con tu proceso.

Porque sabemos que no querés saber de hábitos, querés incorporar los hábitos que te permitan estar en equilibrio y poner en marcha tus proyectos.

No tenemos que olvidarnos que para lograr los resultados que sólo el 10% de las personas obtienen, debemos descubrir qué es lo que el 10% de las personas hace de forma distinta.

Los resultados más significativos vienen de enfocarse en los hábitos y no en las técnicas; de comprometerse con el proceso y no buscar resultados instantáneos.

Hay pautas básicas para desarrollar hábitos

  • Comprometernos con un proceso y con nosotros mismos: dedicar tiempo y disponernos a ejercitarlos durante un período de tiempo que nos permita que se vuelvan naturales (algunos dirán 21 días, otros 66. Nosotros creemos que un mes es un tiempo perfecto).
  • Desarrollar un hábito por vez: la naturaleza de los mismos y múltiples estudios y experiencias muestran que la mejor forma de desarrollar hábitos es proponiéndonos uno por vez. Así es más fácil encontrar foco y dedicar todas nuestras energías a internalizarlo.
  • Hacerlo en Comunidad: una de las mejores maneras de incorporar hábitos es compartiendo con otros lo que nos proponemos, recibiendo acompañamiento e impulso, y exponiéndonos a la mirada de otros así como también compartiendo los logros.
  • Determinar 3 elementos clave: un disparador, una rutina y una recompensa. Si los tenemos bien definidos, ejercitar un hábito es mucho más fácil, motivador y natural.

En función de estas pautas básicas de la naturaleza del desarrollo de hábitos, en el Curso no sólo podés aprender sobre los Superhábitos, sino que los podés incorporar y comenzar a ver y sentir cambios en tu vida.

Si aún no sabes qué hábitos quieres desarrollar, te recomiendo que empiezas por nuestra Guía Gratuita con «10 Hábitos básicos para volverte emprendedor».

Puedes descargarla desde el Kit Gratuito, ingresando tu mail en el formulario a continuación:

ACCEDER AL KIT GRATUITO

Ahora, ¿cómo va a ser el Curso?

El Curso va a estar enfocado en desarrollar un hábito por mes.

Es totalmente on-line. Vamos a trabajar con material en distintos soportes (textos, videos, audios).

Además vamos a presentar entrevistas a expertos, acompañamiento nuestro, videoconferencias un par de veces al mes.

Y, como más vale acompañado que solo, una comunidad de personas que estén buscando lo mismo que vos. Todos enfocados en desarrollar un hábito por mes, impulsándonos y ejercitando el mismo hábito, con foros de discusión y grupos de acompañamiento.

Sumáte con nosotros al desafío de incorporar superhábitos.
Sumáte con nosotros al desafío de incorporar los Superhábitos (Vista Cerro Negro, San Antonio de los Cobres).

 

 ¿Cómo accedo al curso?

Vamos a estar compartiendo novedades en las publicaciones todas las semanas, pero si te interesa acceder directamente y empezar, puedes sumarte haciendo click aquí.

¡Que tengas una linda semana!