Cómo superar el miedo a emprender es una de las preguntas que nos hacen muchos miembros de la Comunidad. El mundo fuera de la oficina y del salario puede ser peligroso. Lanzarse a emprender implica superar miedos que muchas veces son justificados, pero otras tantas vienen tan sólo de supuestos que nos vienen comunicados cada día por amigos, la televisión y de generación en generación.
Supuestos que nunca nos preguntamos si son reales o no y, por lo tanto, dictaminan muchas de nuestras actitudes y expectativas. Este post es acerca de cómo realizando pequeñas acciones podemos vencer el miedo a emprender.
Perder el miedo a lo imposible para lograr emprender
Miro a mi alrededor, sólo encuentro tres rostros de asombro que esperan algo como una excusa o una disculpa por mentir. Lo cierto es que no había mentido.
“¿Cómo hiciste?” fue lo primero que preguntaron después del espaciado silencio.
“Simplemente averigüé como era posible hacerlo y lo hice” respondí, sabiendo exactamente que era lo que estaba pasando.
Lo que hice fue pasar 26 horas seguidas sin comer. Lo hice porque decidí hacer un primer experimento simple para luego llegar a 72 horas sin comer (mayormente para ver hasta dónde podía llegar). Aunque estuve tentado durante el proceso y no fue demasiado fácil, lo cierto es que estas personas no deberían haberse sorprendido por lo que conseguí.
Pasar 24 horas sin comer no sólo es simple de hacer, sino que existen muchas personas que pasan hasta 25 días sin comer voluntariamente (con supervisión médica). Tan sólo hay que buscar en internet “water fasting” y encontrarás muchas experiencias y consejos al respecto.
Las personas con la que estaba charlando simplemente suponían que no se podía. No tenían la obligación de saber esto en particular, pero esta clase de situación se repite con un montón de ejemplos. Uno de estos ejemplos se da con los supuestos alrededor de emprender. Existen miles de ellos, los escuchamos de segunda mano o por sentido común y terminan modificando nuestra visión de que es posible. Terminan entonces coartando nuestra capacidad de emprender y cambiar nuestra vida para mejor.
Para vencer el miedo tenes que desafíar las convenciones e ideas tradicionales respecto de que es posible. Un ejemplo.
En un post anterior Lu comentaba en detalle cómo se prepararon con Mati para enfrentar el desafío de vivir con menos de 100 objetos personales. Este no es el primer desafío de esta naturaleza que hemos enfrentado. La idea de los 100 objetos ya nos había llegado en el pasado pero habíamos empezado por distintos desafíos. Los chicos hicieron el desafío de los 28 litros, Guada hizo el proyecto 33 y yo hice mi propia versión, que comenté en este post.
Cuando le comentamos a las personas sobre nuestras políticas minimalistas, normalmente recuerdan sus armarios llenos de cosas y reaccionan hablando acerca de que su caso es diferente. Ellos “no podrían” hacer algo así. En general se sienten atraídos por algunos beneficios del minimalismo como exceso de tiempo, facilidad para viajar o ganancias financieras, pero rechazan la idea de empezar el cambio.
Muchas veces nos dicen que somos nosotros que tenemos “algo particular”. Lo cierto es que nosotros no somos los únicos haciendo esto, sino que hay miles de personas que están haciendo lo mismo. Las personas generalmente no están acostumbradas a desafiar sus ideas acerca de cómo son los cosas y tienen temor.
Para poder lograr empezar a hacer los cambios lo primero fue tener la motivación de escuchar. Seguramente todos hemos tenido enfrente algún post de minimalismo, pero lo leímos y seguimos de largo. El primer paso en nuestro caso fue decir “¿por qué no?” y probar. Una vez que iniciamos el proceso, fue clave interiorizarnos en las historias de otras personas que habían hecho lo mismo que nosotros. Sus historias nos ayudaron a darnos cuenta de que no era tan difícil conseguir vivir con menos y más tranquilo.
El temor de emprender.
Todos lo hemos escuchado alguna vez. Suena truenos y un órgano terrorífico de fondo: el “x”% de las empresas mueren en “x” cantidad de tiempo (pongan el porcentaje y tiempo que quieran).
La anterior y otra clase de frases resuenan constantemente en los oídos del ciudadano común. Es así que en muchas ocasiones ante la pregunta de si es posible empezar un negocio o ganar dinero con aquello que amas, los comportamientos son similares a los que plantemos anteriormente. Escepticismo, duda y temor.
Es muy cierto que emprender es algo que pocos logran hacer exitosamente. Pero esto se debe mayormente a los emprendedores y su conducta, más que a situaciones de mercado.
Es muy importante saber que cuando te decidas a emprender y tomar riesgos, como por ejemplo renunciar a tu trabajo, muchas personas te van a aconsejar en contra. Van a depositar sus propios miedos y supuestos en tu interior (¡y seguramente no te digan que fue por su culpa que fracasaron anteriormente!)
Para empeorar, en la decisión de emprender entran a jugar muchos de los clásicos supuestos respecto de lo que se puede hacer y que no. También sobre lo que se supone que vos deberías estar haciendo. “deberías tener un trabajo seguro” “hay que dejar de soñar y asentarse” etc. De tanto escuchar estos consejos respecto de lo difícil que es emprender o generar ingresos en paralelo y lo que se supone que deberías estar haciendo terminas convenciéndote de que son ciertas.
Vencer el temor a emprender empieza por darnos cuenta de que muchos de nuestros temores son infundados y están apoyados por nuestra percepción de que es posible y que no. Si no logramos encontrar una forma que nos permita superar el miedo a emprender, podemos sentirnos paralizados
La fórmula que resuelve la pregunta de cómo superar el miedo a emprender
Vencer el temor y obtener resultados distintos requiere de hacer cosas distintas. Y muchas veces esto implica cuestionar nuestros supuestos respecto de lo que es posible y que no lo es.
Como vimos en los apartados, lo anterior se cumple tanto si queres vivir más liviano, si queres pasar 25 días sin comer o simplemente emprender mientras trabajas para poder renunciar y vivir de lo que amas. Existen por suerte dos hábitos que nos puede ayudar a acostumbrarnos a vencer el miedo
Recuerdo la fórmula más completa y básica de enfrentar un miedo: hace repetidas veces eso que te da miedo. Hay muchas técnicas populares, pero ninguna es tan efectiva como esta. El secreto reside en que cada vez que haces lo que te da miedo y no morís, te das cuenta de que las consecuencias no son tan graves como imaginabas.
En la misma dirección, el primer hábito para vencer el miedo es conseguir acostumbrarte a cuestionarte cosas y plantearte desafíos que te saquen de tu zona de comodidad. Esa es la manifestación de una voluntad fuerte de cambiar tu situación. Volviendo al principio, mi desafío del “water fasting” nació simplemente porque charlando con un amigo me comento la “dieta de la manzana”. Todo podría haber quedado ahí simplemente y ser olvidado en el tiempo. Pero me pregunté ¿Podría hacer esto?, investigué literalmente una hora por internet, averigüé precauciones y vi que un día podía hacerse tranquilamente. No lo quise posponer y dos días después simplemente hice el ayuno. Tan simple como eso.
Al igual que con el minimimalismo con pequeños experimentos logramos desafiar los supuestos que nos tiraban atrás.
La segunda práctica para vencer el miedo a emprender viene también de nuestra experiencia desde la fundación de superhábitos. Superhábitos no es un negocio común. Todo los miembros del equipo fuimos de alguna manera “estrellas académicas”. Todos estudiamos con becas y tuvimos muy buenos promedios…sin embargo renunciamos y rechazamos los trabajos que se suponía que debíamos tener…ouch!
¿Que nos llevo a tomar esa decisión suicida? Lo principal fue conocer gente que ya había hecho lo que nosotros. Scott Dismore, una de nuestras inspiraciones tiene una frase que dice “Para hacer lo imposible, rodéate de personas que lo están haciendo”. Nos lo tomamos a pecho y eso fue un punto decisivo. Nos pusimos en contacto con muchos emprendedores y con un grupo bloggers que están haciendo lo mismo que nosotros con distintas temáticas en distintos países de Hispanoamérica. Muchas veces cuando existen dudas o miedos (¡que siempre los hay!) podemos mirar al lado, pedir consejo y también aconsejar. Cuando hace dos meses hacía un asado con Scott y Mati, agradecí profundamente haber adoptado esa filosofía.
Un ejemplo de esto también son Javi y Rox, de Tiempo de aventuras. Ellos son de Barcelona viajan por el mundo (nosotros los conocimos en Argentina) sin trabajar y viviendo exclusivamente de sus ingresos pasivos. ¿Alguno de ellos era hijo de un jeque árabe? No ¿Heredaron algún imperio comercial? No. ¿Alguno ganó un premio Nobel de la economía y tiene una fórmula financiera infalible? No.
Mientras trabajaban en distintas empresas empezaron a generar páginas de internet con la que fueron creando ingresos pasivos en su sentido más puro. No tienen que escribir, llamar, ir a reuniones ni actualizar sus sitios. Sólo disfrutar de sus vacaciones crónicas por el mundo. (Si te contara eso más arriba no me hubieras creído ;) ).
Pasar una semana con ellos en Salta fue una de las experiencias más interesantes que he tenido. Estar con ellos, escuchar su historia y ver como eran personas normales me llevo a preguntarme ¿Por qué no hay más personas emprendiendo y realizando proyectos así?
Rodeate de personas que ya están haciendo lo que vos te ayuda a vencer el miedo, superar las dudas y empezar un camino que te acerque a una vida más libre y llena de desafíos.
En resumen…
Superar el miedo a emprender se relaciona con destruir algunos de los supuestos que nos retienen y cuestionar que es posible y que no. Para poder llevarlo a la práctica podés:
- Acostumbrarte a hacer experimentos y testear supuestos respecto de lo que es posible.
- Rodearte de gente que ya lo haya logrado ¡y ver que son seres humanos como vos!
¡Buena semana!