Lucía Serrano Palacios (Aprende más sobre mí)

Un poco más de mi historia…

Entorno en el que crecí.

Tengo 23 años, nací y viví toda mi vida en Salta (Argentina) en un lugar llamado San Lorenzo que está a 8km. de la capital, lleno de verde y vida, en el que comenzó mi gran amor por la naturaleza y la tranquilidad. Crecí en una familia sin un gran sustento económico, pero nunca nos faltó lo importante. Sin embargo, experimenté muchos cambios en mi vida, tanto en la conformación familiar (mis papás se separaron cuando tenía 6), muchas mudanzas, cambios permanentes en la situación económica, en los colegios y grupos de amigos. Quizá esto me generó la necesidad de encontrar un camino distinto por el cual tener la posibilidad de generar un ambiente de estabilidad y tranquilidad en cuanto a lo económico y a muchos otros aspectos también, y no vivir a merced de las crisis económicas, o de factores externos.

No considero que lo económico sea lo más importante, pero sí me parece un factor relevante sobre todo para quienes vivimos en Latinoamérica y compartimos algunas condiciones de inestabilidad que nos afectan directamente. Por ello quiero poder controlar yo misma la situación y generarme las oportunidades, sobre todo para mi familia futura.

Estoy muy agradecida por lo que tuve y tengo, pero me gustaría crear un ambiente para que mis hijos puedan crecer con más libertad y no tantos condicionamientos externos.

Hasta hace poco no sabía cómo hacerlo. Durante mi niñez y adolescencia, nunca tuve grandes grupos de amigos y para ser sincera no la pasé muy bien. Conservo hasta hoy amigas de la primaria o secundaria, que son muy pocas y muy buenas amigas. Siempre me sentí distinta, sentía que no encajaba, que no disfrutaba de las típicas situaciones sociales, no me gustaba las cosas que estaban de moda, etc. No encontraba mi lugar en el mundo.

Experiencia en la Universidad.

Cuando terminé el colegio decidí estudiar en la Universidad. Afortunadamente, siempre me alentaron a estudiar la carrera que me guste, sin importar cuál fuera. Hoy soy Licenciada en Ciencias de la Comunicación y estoy muy contenta de serlo. Desde los 6 años sabía qué era lo que iba a estudiar, porque me gustaba mucho escribir. En primer año tuve una crisis en la que casi dejo la carrera para estudiar Letras. Pero, sin tomar decisiones apresuradas, esperé un poco y con el tiempo fui descubriendo lo que en realidad significan las comunicaciones y lo mucho que me gusta mirar el mundo y aportar desde allí porque implica:

•             mirar las cosas de forma amplia,

•             aprender a escuchar, comprender,

•             entender que los vínculos son la base de todo, y saber comunicarse es la clave,

•             ayudar a otros a desarrollarse, dar herramientas para que el otro haga por sí mismo,

•             ayudar a otros a organizarse para alcanzar un fin común,

•             compartir con otros la mirada y herramientas que llevan a construir en conjunto, porque así se construyen las grandes cosas y se generan los grandes cambios.

En definitiva, se trata de ayudar a otros, mirar y hacer de forma distinta, construir con otros. Desde esa base, se pueden crear infinitas cosas y generar cambios increíbles en el mundo. Y eso es lo que quiero hacer, por eso estoy acá. Y creo en esas ideas, creo en esa mirada.

El año en el que dí el salto al vacío.

Siempre supe que el trabajo tradicional, con horarios fijos, un jefe y una carrera en la que vamos ascendiendo hasta cierto punto, en el que tenemos estabilidad y cierta automaticidad en las tareas, no es lo que me gusta ni es lo que quiero hacer toda mi vida.

Siempre supe que quería hacer algo que me apasione, algo distinto, y ese camino se fue definiendo de a poco, sobre todo a partir de diversas experiencias de  trabajo en equipo, especialmente con el súper-equipo con el que actualmente trabajo, con el que compartimos muchos sueños y objetivos, nos empujamos a ser lo mejor que podemos ser y con el que aprendí que se puede lograr cualquier cosa si nos rodeamos de las personas que nos inspiran y potencian.

A fines de 2013 decidí dejar mi trabajo para dedicarme 100% a Superhábitos. ¿Por qué? Porque en Superhábitos encuentro el espacio para desarrollarme plenamente, dar y ser lo mejor que puedo de mí misma y compartir experiencias y saberes que pueden hacer la diferencia en las vidas de otros jóvenes y en el mundo.

Lo que más me motiva es sentir que haciendo lo que me apasiona estoy aportando a construir un mundo mejor, en el que van a crecer mis hijos, a quienes voy a poder enseñarles que se puede vivir de lo que uno ama, se puede tener un negocio que aporte valor a otros y que lo más importante de todo es pensar en grande, y animarse a hacer, un poco todos los días. Si hacemos eso en base a los principios correctos, ejercitando nuevos hábitos y rodeándonos de personas que nos inspiren, llegaremos a donde queramos

 

Mi misión personal es ser una fuerza creativa, creadora y transformadora en mi propia vida y en la de los demás, en todos los grupos y ámbitos que forme y de los que forme parte, ayudando a generar crecimiento y alcanzar la libertad y desarrollo plenos (físico, mental, espiritual y emocional).

Y creo firmemente que es posible hacer las cosas distinto, vivir de lo que amamos y trabajar con otros. De hecho, creo que esa es la única forma de cambiar vidas y hacer algo que nos trascienda.

Quiero compartir los saberes y experiencias que puedan servir a otros, motivarlos o ayudarlos a crecer. Aprender de ellos también. Trabajar para instaurar nuevas formas de aprender e intercambiar, focalizando siempre en las potencialidades y el infinito poder de las personas organizadas y movilizadas por objetivos comunes. Ayudar a otros a conocerse a sí mismos, a encontrar su voz, plantearse objetivos y acercarse a ellos con pequeños pasos día a día. Y todo esto puedo desarrollarlo en Superhábitos.

Creo firmemente que:

Sólo podemos desarrollarnos plenamente si hacemos lo que amamos, y buscamos aportar valor a otros permanentemente.

Los hábitos son el mejor camino para vivir intensamente, desarrollarnos, crecer, aportar, conocernos ser quienes queremos ser y llegar a nuestros sueños, paso a paso.

No es emprendedor sólo el que tiene un negocio, lo es también quien asume una actitud proactiva ante la vida y decide hacer lo mejor de sí, innovar y pensar en grande donde sea que esté.

Cuando las personas se organizan con un fin común, buscando aportar a otros, el mundo es un lugar mejor.

Se puede vivir de lo que uno ama, haciéndole bien a otros y (sólo) siendo íntegros.

Lo mejor que podemos hacer es trabajar en nuestro interior primero, y luego rodearnos de personas que saquen lo mejor que tenemos y a quienes podemos aportar.

Y no sólo creo en esto, también lo experimento. Viviendo  día a día en base a los principios correctos, ejercitando hábitos y buscando dar lo mejor de mí en cada cosa que hago, logré muchas cosas lindas. Las más importantes:

#1 Equilibrio.

Me recibí a los 22 años de una carrera universitaria con un muy buen promedio y rompiendo con la idea tan común de que no se puede hacer nada más mientras uno está en la universidad, mientras estudiaba también: participé de un proyecto de investigación con un equipo de 10 personas, de un proyecto de extensión con un equipo de 15 personas, fui ayudante en tres materias, participé de emprendimientos con el equipo de  Superhábitos, hice ejercicio regularmente, no falté a ningún acto o cumpleaños familiar, dormí 7 horas, trabajé, disfruté los fines de semana de actividad familiar, manteniendo el orden físico y mental la mayor parte del tiempo, etc.

No podría haber logrado equilibrar todas estas actividades si no hubiese ejercitado permanentemente nuevos hábitos, si no hubiese aprendido a disfrutar los instantes, poner primero lo primero y priorizar a las personas siempre.

Es el equilibrio lo que me permite ver con más claridad todos los días, y lo que me llevó a animarme a dar el salto al vacío por lo que sueño y creo.

#2 Subir un cerro de más de 5mil metros.

Esto es un logro enorme para mí y no hubiese sido posible sin dos factores clave: cambiar el paradigma de “yo no puedo” por una actitud de auto desafío y de “yo puedo” animándome a hacerlo; y en segundo lugar tener personas que me lo recuerden, que me motiven y me tengan paciencia (en el Cerro Negro ese fue Mati para mí). La misma experiencia de subir el cerro fue como siento que es la vida gracias a los hábitos: un camino lleno de cosas lindas, a veces caminamos solos, a veces acompañados; por momentos ayudamos a otros, por momentos necesitamos ayuda; nos cuesta, es difícil, nos enojamos o frustramos, pero seguimos; varias veces pensamos en rendirnos y volver, pero seguimos. Y cuando llegamos a la cumbre, miramos hacia abajo y no podemos creer que estamos ahí, y cuando bajamos sabemos que llevamos nuestros límites un poco más lejos.

#3 Mejorar mis vínculos con otros.

Tanto a nivel familiar como con amigos y equipos de trabajo. En el último tiempo, gracias al compromiso con los principios y los hábitos, y el ejercicio constante, me relajé mucho, me encontré a mí misma y encontré mi lugar en el mundo. Además, y a partir de lo anterior, hoy puedo decir que tengo mejores relaciones con otros, más profundas y gratificantes. La clave de quien soy y de lo que hago es el haber conocido a las personas que más me inspiran, motivan y sacan lo mejor de mí y con quienes construyo un futuro compartido. Un novio increíble, y dos cuñados-hermanos-compañeros de camino con quienes formamos desde 2011 un equipo-familia en el que amo trabajar, son una de las motivaciones más lindas en momentos difíciles. Mejorar el diálogo con personas de la familia con las que me costó mucho hablar durante mucho tiempo, el simple hecho de hacer el ejercicio de comprender y escuchar más, hacen la diferencia en las relaciones.

 

Esta es mi historia, y quiero volcar todo lo que aprendí para que este sea un espacio para potenciar a otras personas y mostrarles todo lo que es posible a través del ejercicio de los Superhábitos.

 

4 comentarios en «Lucía Serrano Palacios (Aprende más sobre mí)»

  1. Hola Lu!

    Jamás me animé a hacerles un feedback, asi que aprovecho tu perfil acá, que busqué especificamente en Google por otra consulta, para hacerlo.

    Un amigo emprendedor me los presentó y quedé alucinada con como todo lo que escuchaba de ustedes tenía sentido, y como en cada capituo nuevo que me ponía mientras trabajaba, me respondía inquietudes que venia teniendo desde hace años.

    ASI QUE GRACIAS

    Por otro lado me gustaria saber si tienes algun curso | podcast | guia especificamente para ASANA. Lo estoy empezando a explorar por sugerencia de ustedes, para un trabajo nuevo que recien recien arranco, y me gustaria aprender & enseñar como poderlo aplicar y personalizar a las necesidades de la compañia.

    Te agradezco cualquier guia que me puedas brindar al respecto.

    Un abrazo grande a ti, y a todo el quipo-familia

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